jueves, 6 de marzo de 2008

USA, ¿una economía con pies de barro?. El ejemplo sanitario.


No me referiré a la actual crisis financiera. Pero si entraré en algún detalle que me interesa. Acabo de leer un artículo de Vincent Navarro en CounterPunch.com, ‘The Next failure of health Care Reform’, sobre las falsas promesas de los electores demócratas en el campo sanitario y la falta de esperanzas para la reforma real de la sanidad en USA. Creo que ya lo he comentado en algún otro punto. No es nuevo y casi todo es conocido, desde los 47 millones de sin seguros y 120 millones con seguros no completos, a como Hillary fracasó o hizo fracasar su reforma en la Administración Clinton.

Lo que me interesa es la cifra que da sobre que el sector sanitario representa un 16% del PIB en USA, el doble que en Canadá u otros países europeos con servicio de sanidad universal. Lo cual me lleva a la reflexión sobre las mediciones de PIB y porqué USA sigue siendo la mayor economía del mundo.

En este caso volvemos a lo mismo, al sector servicios y de servicios no importables/exportables (no transables creo que se llaman). Es decir, el mismo tipo de servicios que puede ser una peluquería. No creo que haya mucha gente que se vaya a otro país a hacerse las mechas por ser más barato.

Y en otro aspecto la consecuencia de las políticas de privatización de los servicios.

Es decir, en este caso como la privatización consigue cosas menos efectivas y más caras. Evidentemente y muy probablemente, las medicina punta de los USA será la más avanzada del mundo. Por unas facturas millonarias, en algunos hospitales, te podrán casi resucitar, contando con los mejores médicos y con el mejor material. Cientos de pruebas carísimas de diagnóstico, especialistas de lo más especializado, lo mejor de lo mejor. Claro que eso tiene un precio. ¿Para que sirve tener la mejor sanidad si sólo unos cuantos la pueden disfrutar?.

Es el tema recurrente de la privatización en la cual se maximiza pero a costa de dejar fuera de juego a los sectores menos rentables y productivos. Si el sector privado tiende a considerar la optimización como fin esencial, la maximización del beneficio, las políticas sociales deberían tener como fin la distribución máxima. Dos formas de resolución de la optimización de los sistemas de ecuaciones, con resultados diferentes.

Pero es que resulta que la maximización en este caso, es hasta engañosa. El doble del PIB en sanidad y no hemos de olvidar que se trata de un PIB con una renta per capita elevada.

En los efectos globales sobre la economía, no solo se trata de una medida contraproducente sino que es una medida en nada optimizadora de los recursos y por lo tanto poco económica. ¿Es este un ejemplo de talón de Aquiles de las teorías neoliberales?. Lo que es una pena es la poca cualificación de la izquierda para atacar con este tipo de argumentos a la derecha. La intelectualidad progre que se queda en cuatro malandrines.

Volviendo al asunto de la falta de eficiencia de la sanidad privatizada norteamericana y en su capacidad de crear nuevos servicios intermedios, nuevos sectores empresariales que en gran parte son del todo innecesarios. Por lo tanto, si un 8% del PIB norteamericano se basa en factores innecesarios, existe una inflación de servicios en el interior de la economía norteamericana, que si bien mantiene a mucha gente y mantiene a una clase media importante (media alta), también es cierto que lo hace en base de un deterioro de las bases reales productivas. Una inflación interna de la economía que no se muestra en las cifras macro por medio de sectores de servicios no transables.

Este aspecto estimula las teorías neoliberales que pueden justificar la gran impresión de billetes verdes de nulo valor para pagar el inmenso déficit por cuenta corriente desde los años 60 y 70. Se trata simplemente de hacer ver que se está más gordo de lo que la economía norteamericana realmente es, para hacer ver que se es más solvente. Sin considerar las ineficiencias y también los costes sociales que ello significa.

Lamentablemente, las protestas sociales en USA están más identificadas con la lucha de igualdad racial que con la lucha de clase y la identificación de aspectos ideológicos esenciales de las doctrinas neoliberales, se han interiorizado demasiado en buena parte de la sociedad de las clases trabajadoras de los USA.

Lo malo o lo bueno de todo ello, es que no es un sistema que pueda persistir por siempre a efectos de relaciones con el resto de las economías mundiales. Si bien USA mantiene una gran cohesión interna a nivel de identificación nacional, no así puede seguir manteniendo el peso demográfico ni de capacidad productiva como para mantener ese estatus a nivel mundial.

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola María.
He alcanzado tu blog desde los comentarios del IE.

Interesante visión ...