miércoles, 4 de mayo de 2011

La cretina de la Rahola ataca de nuevo.

No es la primera vez que la Rahola se destaca por insultar, despreciar y ningunear a quien le da la gana. Lo hace desde su tribuna particular en el panfleto de La Vanguardia. No pierdo el tiempo desde luego viéndola en la tele tanto en TV3 con el sobrevalorado y absurdo Cuní o en Tele5.

Bueno, ayer tuvo la desfachatez de llamar cretinos a todos los 'conspiranoicos'. Los conspiranoicos son todos aquellos que no piensen como ella. O mejor dicho, los que no se crean lo que dicen los medios de manipulación de masas. A mí la Rahola siempre me ha parecido un bufón de la prensa, de los que hay muchos. Pero claro la Rahola tiene sus características propias. Nunca jamás va más allá de una opinión y jamás saca detalles o información sustanciosa, se limita a pontificar sobre lo que se escribe. Pontificar es un término que conoce bien, se trata de declarar quienes son buenos y quienes son malos. La ética judeocristianamaniqueista es una de las características de la bufonada en toda su simplicidad absurda e infantil. Algo que la hace de lo más bufa. Los que no opinan como ella siempre son catalogados en la inquisición ética particular, con especial cuidado para los musulmanes que en su escala de valores deben de estar a la altura de los animales o poco menos. Los musulmanes no son personas. Y por supuesto todos los musulmanes son yihadistas con pinta de ogros asesinos. Se podría pensar que tiene algún problema mental si no se conociera su sionismo. Aunque claro, el sionismo en sí mismo ya es un problema mental.

La prepotencia de este personaje es de lo más absurdo. He conocido y conozco personas prepotentes. Solo un mínimo de ellas tienen alguna cualidad sobresaliente que les hace destacar y aunque su prepotencia sea socialmente incorrecta pueden tener su lógica. Lamentablemente la prepotencia de los demás solo es síntoma de mediocridad sumada a la ambición de los estúpidos. Y en muchas ocasiones les hace parecer bufos. De esos hay muchos que salen en la tele. No me extraña que salga la tal Rahola.

En fin, haría bien cualquier medio de comunicación que quisiera parecer mínimamente solvente en evitar que apareciera por ahí. Claro que es un personaje conocido y eso parece que a veces se confunde con solvencia. Que yo sepa la solvencia del bufón. Pero algunos se la creen. En fin, problema suyo. Tiende a servir tales servidores de la manipulación para reforzar determinadas opiniones y hacer creer en la 'verdad' de la mentira. Y por supuesto, cuando se pone en evidencia cualquier cosa se tacha de cretinos a los demás lo mismo que los dominicos en su tiempo. A lo mejor también tiene máquinas de torturas por ahí. Aunque sospecho que es más dada al voyerismo de espectáculos de recreación de sangre de los tópicos que ayuda a deshumanizar. De hecho no hay gran diferencia entre personajes como la Rahola y la propaganda nazi. La deshumanización, el insulto y el ataque a la crítica... me suena de los años 30. Pero claro, para evitar la crítica nos ponemos el disfraz sionista y atacamos como perros rabiosos a quien ataca. Es el cuento de siempre. En fin, la verdad siempre tiene sus recompensas, aunque sea a costa de bufones como la cretina de la Rahola.

No hay comentarios: